
Te dije que algún día volveríamos a vernos y así fue, las almas que se rasguñan el aura no pueden durar tanto tiempo separadas. Esa madrugada en tu cama la luna supo que por fin la historia estaba cediendo, y nosotros luces fugaces, solo somos un suspiro de la noche que tanto se alarga. No puedo dejar de sentir cuando estoy contigo, hasta tu aliento me hace vibrar, es como si mi razón se quebrantara. Se tu pasado y me aprendí tu presente, se que hay una persona mas. Apostaría todo para que nuestro encuentro no hubiese sido errado, para que al encontrarte amor mío, no hubiera encontrado también a tu otro amor. Se que me amas como yo a ti, y se que también amas a alguien mas, en esta vida podemos amar tanto que no nos damos cuenta de que los amores en trió son agua que corre peligrosamente por nuestras emociones. Jamás pensé que un trió alguna vez tendría un significado para mi, cuando estas conmigo das vestigios de que no eres solo mío, y entonces mi alma egocéntrica lo sacrifica todo para sentirte único, sabiendo que cuando te vas te vuelvo a compartir. Intento apagar mi conciencia, entender que ese amor llego temprano en tu vida y yo tarde, que eres solo una victima mas como los otros restantes. Que no somos culpables por amar sino por ser cómplices, que no hay peor excusa para explicar nuestra situación que no sea la de escaparnos a sabiendas de no querer ser encontrados. En nuestra cama amor, no hay espacio para alguien más, y sin embargo esta omnipresente.
Quiero encontrarte en Buenos Aires, te espero donde solo tus rastros saben encontrarme.
"Cuando uno tiene sed pero el agua no esta cerca,
Cuando uno quiere beber pero el agua no esta cerca"







Su boca será barro y mi saliva el abono para fertilizar su tierra. Mi cuerpo será el mar y sus manos la marea que lo sostendrá firmemente. Mi hombre ideal deberá tener un ojo azul y un ojo verde. El será el amor de mi vida y yo el amor de la suya, seremos aquellas estrellas que roten la tierra en un peregrinaje épico. El despertara los domingos a merced de la constelación de lunares de mi espalda, y yo seré fiel testigo de cómo inventaremos un nuevo idioma para cantarnos tangos a las ocho de la mañana, yo seré su alba y el será la línea de mi horizonte. Pelearemos y todo volverá a su cauce con unos caramelos de manzana verde, y unos besos de azúcar. Mi hombre ideal no sabrá cocinar pero si alimentar mi alma, no será muy desordenado pero si pondrá de cabeza mi mundo, hablara del tiempo como si fuese suyo y me convencerá para irnos de mochileros a un cráter en la luna. El será cada verso, cada letra y cada acento, se convertirá en el elixir de mis letras y profanara cualquier concepto que yo pudiera tener de lo que es amar. Porque el amor se reinventa en cada nueva experiencia, y hace de sus antojo cualquier especulación que trata de encasillarlo en una definición. Mi hombre ideal será de confite y yo seré la melaza en la cual nos fundiremos. Mi hombre ideal será la derecha de mi izquierda.



